A principios
de esta semana había comentado con mucha alegría y emoción, el relanzamiento de
una colección (Palabra e Imagen) por parte de La Fábrica, que había marcado historia en la década del sesenta y setenta del siglo pasado en España.
La unión en un libro de dos amigos pero con diferente personalidad como son
la literatura y la fotografía; para mi, es una combinación iniciática, una emoción primigenia.
Gracias a
algunos comentarios, como el de Ercanito , retomo esta reflexión y lo hago a través de unos párrafos extraídos de un
libro del fotógrafo de Magnum, Ferdinando Scianna titulado Las palabras y las fotos (2009). Y que me parece fundamental.
“Mi
concepción de la fotografía - señala Scianna - se centra en la idea del relato y de la memoria. Lo
mismo que sustenta la literatura. Esta consideración resulta provocadora para
la deriva de la noción de fotografía en la cultura contemporánea.
Fiesta Religiosa en Sicilia - 1965 Ensayo: Leonardo Sciascia - Fotografías: Ferdinando Scianna |
La fotografía
fue históricamente vivida y pensada como instrumento y testimonio. Sirvió para
guardar nuestra memoria, la huella del tiempo que corre inexorable. Era
escritura de la realidad.
Fiesta Religiosa en Sicilia - 1965 Ensayo: Leonardo Sciascia - Fotografías: Ferdinando Scianna |
Hoy ha mutado su concepto central. Se mira, se
muestra y se usa la imagen fotográfica como cualquier objeto estético. Se exige
un acercamiento a ella igual al que requiere un cuadro” concluye con cierto
escepticismo o amargura, este gran fotógrafo italiano.
Fiesta Religiosa en Sicilia - 1965 Ensayo: Leonardo Sciascia - Fotografías: Ferdinando Scianna |
Debo confesar que esta cita textual de Scianna me crea una gran incertidumbre de cara al futuro de la fotografía
o para el ejercicio de fotografiar.
No es mi
intención en este post reflexionar a fondo sobre esta dicotomía actual de ver la fotografía
como un acto estético versus la fotografía como documento de una época. Las
respuestas aún no las tengo.
Santiago de Compostela - Galicia - España © Navia |
Pero si
tengo algunas ideas y reflexiones con las cuales me identifico y que pertenecen a un fotógrafo con mayúsculas. Me refiero a José Manuel Navia que bien pueden abrir algunos caminos:
“En definitiva,
para muchos de nosotros, la fotografía es y sigue siendo, ante todo, mirada, el
ejercicio de la mirada.
Y su resultado siempre es un rectángulo o cuadrado
bidimensional definido por sus bordes, sea una cartulina o una pantalla. La fotografía
contiene algo que se parece al mundo, pero no es el mundo, aunque pertenece a él.
Y desde ese punto de vista, yendo ya a lo que se supone que es el motivo
central de este artículo, el paso del soporte argéntico (por usar el término
preciso adoptado en Francia) al digital es sin duda un cambio muy importante,
pero acaso no tan sustancial como quisieran hacernos creer”
Un gran abrazo y buen fin de semana!!
Cada vez entiendo más a Ferdinando Scianna. Aunque cabe decir que como tantísimos otros de su corriente y época de máxima actividad, hacía una fotografía tan profunda y documental como estética, y por ello ha llegado a donde está. Sus fotos son un legado impagable gracias a saber conjugar ambas cosas, aunque el objetivo único o primero fuera el que es.
ResponderEliminarUn abrazo, y gracias por la cita.
Ercanito, creo que es el camino a seguir el que se refier Scianna. Aunque no comparto su pesimismo. Y no debemos dejarnos corromper en extremo por las nuevas tendencias. Ese es el desafio. Un abrazo y buen fin de semana!!
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