Sin entrar a valorar el trabajo de Levitas, la relación con Winogrand es absurda. Más bien parece un truco para atraer audiencia. Yo creo que no es necesario desmontar a los clásicos porque es el tiempo quien se encarga de recolocarnos en la experiencia fotográfica por los cambios de lugares y gente. Lo que sí sería interesante de recordar es que no se deben imitar a los clásicos sino aprender de ellos. Los clásicos son inimitables y tratar de hacer lo mismo solo termina en malas copias.
puedes que tengas razón, José... con respecto a que puede ser un truco para atraer audiencias a pesar que el festival de Arles tiene mucho prestigio y seriedad. Lo que hablamos el fin de semana pasado y sólo para reflexionar es poner a los "clásicos" abajo para intentar crear cosas diferentes. No dejarlos siempre arriba y tenerlos siempre en un pedestal. Los "clásicos" vivieron en una época diferente a la actual y nosotros debemos pensar este hoy con otras herramientas. De allí viene este pensamiento del post. Y por supuesto, bienvenidos "los clásicos" y como dices tú, para aprender o reaprender de ellos. Eso es muy saludable para la composición y para la fotografía. Pero siempre tenemos que dar un paso adelante. Y sino mira como surgió William Klein o Robert Frank o el mismo Garry Winogrand. Ellos intentaron ir contra la marea en sus tiempos. Abrazo y gracias por tus comentarios.
Exacto, y como ejemplo, de nuevo ponemos a Winogrand que vivió fascinado por Walker Evans (y Robert Frank), y sin embargo su lenguaje es único, personal, inconfundible. Aprendió de ellos, tomó ideas, y la idea general de, caramba, la fotografía es capaz de esto! Y a partir de ahí firmar con su punto de vista. Si decido ser cantante nunca tendré la voz de Frank Sinatra, cierto?
Sin entrar a valorar el trabajo de Levitas, la relación con Winogrand es absurda. Más bien parece un truco para atraer audiencia. Yo creo que no es necesario desmontar a los clásicos porque es el tiempo quien se encarga de recolocarnos en la experiencia fotográfica por los cambios de lugares y gente. Lo que sí sería interesante de recordar es que no se deben imitar a los clásicos sino aprender de ellos. Los clásicos son inimitables y tratar de hacer lo mismo solo termina en malas copias.
ResponderEliminarpuedes que tengas razón, José... con respecto a que puede ser un truco para atraer audiencias a pesar que el festival de Arles tiene mucho prestigio y seriedad.
EliminarLo que hablamos el fin de semana pasado y sólo para reflexionar es poner a los "clásicos" abajo para intentar crear cosas diferentes. No dejarlos siempre arriba y tenerlos siempre en un pedestal. Los "clásicos" vivieron en una época diferente a la actual y nosotros debemos pensar este hoy con otras herramientas. De allí viene este pensamiento del post.
Y por supuesto, bienvenidos "los clásicos" y como dices tú, para aprender o reaprender de ellos. Eso es muy saludable para la composición y para la fotografía. Pero siempre tenemos que dar un paso adelante. Y sino mira como surgió William Klein o Robert Frank o el mismo Garry Winogrand. Ellos intentaron ir contra la marea en sus tiempos. Abrazo y gracias por tus comentarios.
Exacto, y como ejemplo, de nuevo ponemos a Winogrand que vivió fascinado por Walker Evans (y Robert Frank), y sin embargo su lenguaje es único, personal, inconfundible. Aprendió de ellos, tomó ideas, y la idea general de, caramba, la fotografía es capaz de esto! Y a partir de ahí firmar con su punto de vista. Si decido ser cantante nunca tendré la voz de Frank Sinatra, cierto?
ResponderEliminarA propósito, veo más heredero de Winogrand a un joven fotógrafo, Andre D. Wagner.
ResponderEliminarhttp://www.abstractelements.com/street#1
Y hablando de Garry y Arles, allí estuvo en 1982 (foto de Guy Le Querrec, cortesía de Magnum):
http://mediastore2.magnumphotos.com/CoreXDoc/MAG/Media/TR2/9/a/e/9/PAR364331.jpg
gracias por la información sobre Wagner. Investigaré. un abrazo!
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