Visita a Perpignan

Perpignan - Francia

No tengo mucho más que resaltar sobre el Visa Pour l' Image luego de leer las excelentes notas realizadas por Paco Elvira y María Rosa Vila en sus respectivos blogs.

Vale la pena hojear sus notas antes o después de ir al festival; te aclaran o te reafirman algunas opiniones y en otros casos, te sirven de base para complementar otras ideas o sugerencias.

Sus resúmenes se complementan con mi propia visión sobre este prestigioso festival internacional de fotoperiodismo, enmarcado en una ciudad que me recuerda un poco a Lisboa por sus ruinosas iglesias, laberínticas calles y casas desprolijas que no dejan de crear una atmósfera bella, bohemia y multicultural.

                                                                    Perpignan - France

De esta manera, el “afuera” del festival merece ser observado tanto como el “adentro”; en el cual Perpignan se viste de fiesta en su totalidad durante estos días y hasta la gente que la recorre, sus paredes y sus calles tienen algo que decir, que contar de una manera especial.

El afuera lo constituye la XVª edición del Visa Off , organizado por la Asociación de comerciantes de Perpignan. En más de 80 comercios, se exponen los trabajos de diferentes fotógrafos catalogados como “aficionados” o “amateurs” por la organización pero que muestran una gran versatilidad y calidad profesional.

Lo primero que hice al llegar a la ciudad fue ir a visitar la exposición de mi amigo Carlos Prieto ubicado –con gran acierto - en una librería del casco antiguo. Entre comics y libros pude observar su interesante trabajo sobre “Contrastes en la verdadera Estambul”.

                              Exposición de Carlos Prieto -Librería Bd en Bulle - Perpignan - France

Por otro lado, el "amateurismo" lo muestran algunos comerciantes que con muy mal gusto y elección, exponen algunos trabajos de tipo humanitarios en los escaparates de tiendas de ropa para clientes con nivel adquisitivo alto y se me ocurrió la idea de hacer un trabajo sobre ello en el futuro: Contrastes de la verdadera Perpignan, no?.

Otro detalle que me llamó la atención fue la poca gente que asistió  a comienzos de esta semana,  a las exposiciones del Visa pour l’ Image. Y este inesperado detalle se agradecia ya que podías observar con detenimiento los trabajos sin ser atropellado por ninguna persona.

                                              World Press Photo - Counvent des Minimes

                                Couvent Sainte Claire

“A partir del miércoles, todo cambiará – me dice con ilusión el propietario catalán del pintoresco hotel Avenir - tengo las habitaciones completas a partir de esa fecha”. Una verdadera "ganga" ese hotel de una estrella: 25 euros la noche / habitación doble.

No crean que, a esta altura del análisis, me olvidé de las veladas fotográficas. Desde mi punto de vista, el festival brilla especialmente con estas veladas nocturnas.  Empezaron justo el día que llegué, el lunes 30 de agosto a la noche en el recinto del Campo Santo.

Esa noche, ante la presencia de las autoridades del festival, el Ministro de Cultura francés Frédéric Mitterrand (protagonizó una risueña e inesperada salida con su comitiva por la parte delantera unos minutos antes que terminara el show) y ante un numeroso público, se exhibieron interesantes trabajos fotográficos acompañados con estimulante música.

Me han gustado mucho el trabajo Bolivia de Pietro Paolini (Terra Project – Picturetank); Shangai del colectivo Sanya y Yann Layma; Mongolia de Paula Bronstein (Getty Images); Nomads Land de Van der Stigghel (Signatures) y para terminar:  el mejor de todos por lo ingenioso, cínico y de buen sentido del humor que me hizo acordar a Martin Parr: Suiza vs el mundo de Paolo Woods (Anzenberger).