Miradas Cómplices constituye un laboratorio de ideas, de reflexiones fotográficas e imágenes que, quizás, encuentren vuestra complicidad.

Translate

Mostrando entradas con la etiqueta reflejos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta reflejos. Mostrar todas las entradas

miércoles, 19 de diciembre de 2012

Los reflejos de Serge Clement

Girona, Catalunya © Marcelo Caballero

Siempre me he sentido fascinado y atento hacia los reflejos. 
Siempre he sentido una especial deferencia por esas visiones tan inverosímiles e imprevisibles que nos regalan,  de tanto en tanto, las luces en combinación con ciertos colores reflejados en  cristales, espejos de cualquier ciudad.
Para mi, todo ello es vitalidad urbana, una continuidad asombrosa de algo cotidiano.
Alguien que sabe mucho de todo esto y lo transmite con una gran carga poética es el fotógrafo canadiense Serge Clement.

 © Serge Clement

Me ha interesado un libro de él en particular que muestra su ecléctica tendencia por los reflejos y marca su gran capacidad de observación de unas realidades reflejadas,   a través de su cámara y que contienen un sentido onírico, misterioso, casi ficcional .
El libro en cuestión es Courants. Contre-courants e incluye dos volúmenes y fue publicado en Paris en el 2007 por Editions Marval.



Luego de hojear varias de las 200 páginas de esta maravillosa obra,  me da la sensación que, a través de estas imágenes, Clement interroga, de alguna manera,  la vida en la metrópolis occidental.

 © Serge Clement
 © Serge Clement

 Realizado a mitad de camino entre Montreal, París y Nueva York, las fotografías de este libro nos llevan hacia perspectivas desconocidas y concentran una multitud de signos, símbolos urbanos que se mezclan, chocan y se reúnen en un espacio diferente.


 © Serge Clement
 © Serge Clement

Un abrazo y hasta el viernes!

sábado, 10 de julio de 2010

Un reflejo pronto serás. Inconvenientes fotográficos en Cadaqués

Ayer hicimos una visita relámpago a Cadaqués para hacerle conocer a una amiga la bella ciudad ampurdanesa. Por diferentes razones personales no podíamos quedarnos ni siquiera una noche. Sin embargo, la breve estancia fue muy divertida y entretenida. Hasta aquí todo bien y ello quedará como un hermoso recuerdo familiar.
El tema es que como fotógrafo este tipo de paseo tuvo una serie de inconvenientes que fueron insalvables.
El primero de ellos es que arribamos a Cadaqués a media mañana. Como bien sabemos los que nos gusta la fotografía, las primeras o las últimas luces son las más apropiadas para capturar imágenes. Algo que no fue posible ayer y yo lo sabía de antemano.
Y a todo esto había que agregar a otro protagonista involuntario: un cielo plomizo y sin contraste de nubes.  Nos acompañó a todo momento y era de un gris tan monocromático que me espantaba con sólo mirarlo. Me hacía recordar aquellas imágenes sobrexpuestas con los cielos “quemados”.
En fin, no era un día ideal para hacer buenas fotografías. Entonces pensé que no era mala idea recurrir a reflejos que siempre me han parecido sugerentes cuando ni la hora ni el día acompañan.
Los resultados me han parecido interesantes y estimuladores en este contexto tan dispar. Por eso deseo compartir con ustedes algunas de estos reflejos. Desde ya muchas gracias y que tengan muy buen fin de semana!!